24 nov 2015

La humedad...

La humedad de nuestros cuerpos se hizo presente. El sudor de tu frente, el ardor en mi espalda y la oscuridad de la noche, fueron en conjunto el preludio de nuestra fusión.

Por tu boca resbalaron gemidos, hilillos de saliva, incluso escuché "...repetir mi nombre como una letanía. Bajito. Así es como mi nombre se convirtió en un lamento" y el calor que envolvía la habitación, en parte, se debía a esa debilidad que tengo por hacerte mía y decirte al oído cuanto te quiero.

Juan Márquez®

23 nov 2015

Estoy parada...

Estoy parada frente a un infinito, me dije mientras tomaba tu mano. No conozco un acto temerario más grande que amar a alguien. ¿Cómo puedes pensar en que puedes siquiera conocerlo un poco algún día? ¿Cómo puedes aferrarte a algo tan inestable como lo es un ser humano?
Tragué saliva, porque no sabía cómo asimilar en un segundo tan pequeño algo de una magnitud tan grande. Llevaste mis dedos a tus labios y sonreíste.
Y me di cuenta que hay una magia especial en la incertidumbre que genera el no saber qué tendremos mañana, en no saber en quiénes nos vamos a convertir. Porque aprendí que somos elecciones. Eres mi elección. Y espero ser la tuya cuando despertemos por la mañana y encuentres que no me conoces completamente todavía, pero que tienes ese reto por el resto de estos días.

—Paola E. Haiat

22 nov 2015

Siembre habrá...

Siempre habrá una mejor forma, aunque no lo entiendas, de querer besarle los labios a esa persona que, día tras día, te sonríe tan bonito que no paras de imaginarte una vida: un futuro. Ahora mismo, lo único que le encuentro sentido; en toda la vida, es ella. Mirarle se me ha vuelto una adicción de esas que terminan por destruirte. Y no sé si vaya a venir. O si se queda y nos morimos un poquito cada día más por ser tan efímeros. Pero, entonces se nos da bien sonreír. No importan las heridas, o si llevamos cicatrices del pasado, si hemos cometidos delitos al dejarnos caer en el precipicio. Pero juro que <<cometernos>> será el mayor delito, y lo más bonito que se haya pintado en el cielo. Y el cielo baja, y posa en el borde de tus labios. Los imagino. Los toco rodeandolos con las yemas de mis dedos. Te acaricio. Me pierdo. Conseguimos el punto exacto para encajar en una realidad de mierda. Empezamos a querernos aunque los kilómetros nos maten y los vientos soplen en contra de cada verso que te escribo. Si pudiera pedir un deseo: te pido a ti envuelta en mis brazos, acariciando mi cabello, mirando mis ojos (yo miro los tuyos), sonriendo como si el mundo se fuera a acabar allí. Y no le daría importancia sí tú estás ahí; completando el rompecabezas de siempre. Nos besamos, y sentimos cómo se nos desgasta la vida y se enciende al mismo tiempo las emociones que nos guardamos por cobardes, por desaparecer de repente y no querer saber ni el sonido de las olas. Quizá los rincones oscuros sean una escapatoria, claro. Pero lo cierto es que tomo las suficientes fuerzas para tomarte por los hombros, llevarte hacia mi pecho, bordar tu cuello con mis manos, y hacer de ti una libertad en mi boca. ¿Por qué estás tan lejos? No lo sé. Pero empiezo a contar kilómetros. Me desespero. Miro al techo buscando alguna explicación bastante razonable y, lo único que encuentro, son fotografías tuyas tatuadas en mi mente. Pero siempre habrá una mejor formar de besarte los labios, aunque la distancia me lo impida.

21 nov 2015

Es curioso como funciona la vida...


Es curioso como funciona la vida... El corazón y las personas.

Ayer aún no existías,
Era libre, fuerte e independiente,
Tal vez un poco vacía, un tanto incompleta...
Todo sin darme cuenta.

Ayer, sólo eras un rostro,
Ahora, un nombre y significado,
Ayer, no tenías presencia,
Ahora, tu ausencia tiene sombra,
Ayer, ¿A quién le importaba?
Si estabas aquí, allá... era indiferente,
Pero Ahora, cuento los días:
tantos aquí, tantos allá.
Ahora, hasta podría extrañarte...
¡Pero qué mas da! De eso se trata el amor.

Ahora conozco tu rostro, tu historia,
Aún soy libre, fuerte e independiente,
Pero sé que existes, que llevas una parte,
Que sola puedo estar bien, pero contigo...
Aún mejor.
—"Pero ahora..."; Texto Personal—

17 nov 2015

Me gustas...

Me gusta la forma que tienes para desordenar mi vida. Te encuentras habitando cada parte de mí: y nada puede ser más bonito. ¿Recuerdas? Te he dicho que aquí me quedo, queriéndote hasta los huesos. Y mereces más. ¡Mucho más! Cariño; voy a conquistarte desde cero. Y empezaré por decirte, que quiero conocer cada lunar que esconde tu cuerpo, los contaré uno por uno. Y por cada lunar, peca, o herida: besaré tu boca, y luego, buscaré alguna forma de hacerte saber que he soñado con que te quedas conmigo para siempre. Aunque para siempre sólo duré un momento. Está bien. Creo que nos hemos quedados en el mismo tren, y luego en el mismo anden, tomados de las manos, caminando superficies mojadas, llenas de luces: la ciudad. ¿Sabes? Me gusta imaginar cuando sonríes. Porque sí, porque cuando lo haces, tomo un rumbo que me da a la puerta de tu casa. Porque si sonríes, me dan ganas de volar, y me sonrojo buscándote todo el tiempo. Porque, si sonríes, las esperanzas nos toman desprevenidos y nos lleva a un viaje que sólo tú y yo entendemos: y no importa resto. Debe haber mucha gente allá afuera. Y yo sólo quiero que me abraces fuerte, con tus kilómetros demás, y tu vida revuelta, con tus brazos, manos, y me sujetes para no caer en el abismo. ¡Te quiero! Y no hay una chica más guapa que tú. Ven, y hagamos que todo esto valga la pena. Me gustas.
✎ David Ruiz

16 nov 2015

Ella...

Ella, habría ganado la sonrisa más bonita del mundo. Era libre. Y yo amaba su libertad. Para mí era la chica más excitante del universo, incluso. Tenía magia en sus curvas y, ocasionaba que, algunas veces, parecía enredarse con mi vida por no tener control de su belleza. Tenía los labios carmesí, y una mejillas blancas ruborizadas. Cuando mucho, podría sostener la idea de alejarme de ella, pero me parecía imposible alejarme del mundo que me acogió en sus abrazos, y besó las cicatrices que traía arrastrando desde hace tiempo. La extraño, sí, bueno, no parecería raro extrañar ciertas personas que, aunque se vayan demasiado pronto de tu vida, siguen ahí clavadas. Y sigo yo amando los imposibles. No parece tan absurdo. 
✎ David Ruiz

✨

Buscar este blog

Con la tecnología de Blogger.

Me siento extraña...

Me siento extraña sabes siento como si algo de mi que es muy importante ha desaparecido y no lo encuentro y me hace falta, tú te vas y y...

Gracias!!!

contador de visitas